A la hora de analizar los tipos de viviendas residenciales que existen podemos hacer multitud de distinciones.
Para realizar esta clasificación sobre qué tipos de viviendas existen, atenderemos exclusivamente a su agrupación, independientemente del material, emplazamiento o técnica constructiva empleada en su fabricación.
Según este criterio, podemos dividir las viviendas en dos tipos: individuales o colectivas.
¿Qué tipos de propiedades residenciales existen y en qué se diferencian?
Clasificar las viviendas como propiedades residenciales se puede hacer según muchas características. Por ejemplo, existen bienes inmuebles y bienes muebles. La diferencia más notoria entre ambos es que los bienes muebles pueden ser transportados de un sitio a otro, mientras que los bienes inmuebles son todas aquellas posesiones, propiedades y riquezas que constituyen el patrimonio de cada persona física o natural, o de una empresa o persona jurídica sin que puedan ser movilizadas de un lugar a otro. Tienen una dirección física y están regidos por leyes específicas.
La mayoría conoce los bienes inmuebles. Así que empezaremos con una clasificación de éstos:
VIVIENDAS INDIVIDUALES O UNIFAMILIARES:
Vivienda aislada (casas terreras aisladas y chalets): Es una vivienda unifamiliar que es independiente y que no linda con otras viviendas. Generalmente tienen algo de terreno alrededor.
Vivienda pareada: Aunque desde fuera parece una sola vivienda en realidad son dos. Suelen aprovechar un mismo proyecto para reducir costes. Están destinadas a ser ocupadas por una sola familia que vive en la edificación entera. La principal característica es que no disponen de accesos y servicios compartidos con otras viviendas. En muchos casos la parcela es dominada por una vivienda de madera unifamiliar.
Vivienda adosada: Suelen ser hileras de viviendas de distintas alturas según el caso. Comparten elementos comunes como jardines, piscina o garaje. En el proyecto de edificación tienden a compartir el forjado de las plantas, con divisiones en tabiquería. El aislamiento acústico entre viviendas suele cumplir nada más que los mínimos legales. Pueden tener zonas comunes en algunos casos, como entradas a garajes, sean comunes o individuales en su forma final.
VIVIENDAS COLECTIVAS O PLURIFAMILIARES:
Pisos: Se trata de viviendas que suelen tener más de un dormitorio en edificios con zonas o servicios comunes. Generalmente destinados a uso familiar en zonas menos turísticos que los apartamentos. Suelen encontrarse en edificios que disponen de servicios compartidos.
Bajos con jardín (o patio interior): Siendo una variante de los pisos que se encuentran en la zona más baja del edificio. Tienen la ventaja del espacio al aire libre, ya sea exterior con la terraza, o interior si el edicicio no cuenta con espacios exteriores en su configuración.
Apartamentos: Son viviendas con una o varias habitaciones en complejos residenciales o zonas más turísticas. El espacio disponible suele ser menor que una vivienda habitual. Normalmente se destinan a segundas residencias o alquileres vacacionales.
Estudios: Similar a un apartamento, pero sin divisiones interiores. De espacio diáfano, contiene todo en un mismo habitáculo, con excepción (generalmente) del baño.
Dúplex (y tríplex): Se tratan de pisos que tienen dos y tres plantas comunicadas por una escalera interior. Permite tener dos entradas exteriores que comunican con la vivienda en distintos planos de la misma, o bien se comunican con alguna región interior probablemente comunitaria en uno de ellos: Como pasillos que dan a una piscina, jardín, parque, o entrada al aire libre desde otro punto para la comunidad.
Áticos: Son los últimos pisos de los edificios y se destacan por tener un privilegio que muchos queremos: tener una amplia terraza exterior. Es importante que tengan un buen aislamiento térmico en la parte superior.
Dentro de los bienes inmuebles podríamos contar con las casas modulares, las caravanas, las cásas móviles, las viviendas contenedor, los trailers unifamiliares, y un largo etcétera.
¿Cuál es tu tipo de vivienda favorita?
Como podemos observar la variedad es enorme.
¿Con cuál te quedarías?
Si eres como muchos de los que se apuntan a la moda, tras la situación de aislamiento que ha vivido el mundo entero, en que una prioridad es el espacio al aire libre, sabrás que hay cientos de miles de familias que están adquiriendo bienes muebles o inmuebles con acceso a espacios abiertos.
Si tu caso, por ejemplo, es que quieres saber cómo comprar casa con terreno o instalarte en uno que aún no tiene vivienda, según tus posibilidades y necesidades, tendrás que prestar atención a la oferta local de terrenos habilitados, legislación de ayuntamientos, y otros asuntos. Veamos los dos casos que comentamos:
Comprar una casa con terreno: Dispones con la ventaja de una construcción previa y sin demoras para vivir en ella. Eso sí, limitada a medidas y dimensiones a menos que puedas ampliar o edificar encima. Puede resultar ventajosa si lo que se quieres es invertir o reformarla como vivienda habitual, vacacional o de alquiler.
Comprar terreno sin casa: Tienes muchas más posibilidades ya que puedes elegir qué funcionalidad darle; si pondrás un bien inmueble o mueble; construir una parte del terreno o su totalidad; etc.
¿Cuánto puedes gastarte en comprar una casa?
Dependiendo del capital disponible y las intenciones con la compra, podrías comprar directamente una vivienda construida y para ello dispones de un amplio mercado inmobiliario. Si te decantas por un terreno, puedes elegir qué tipo de casa construyes.
Hoy en día puedes hacer una casa en ladrillo, en madera, prefabricada, con contenedores, etc.
Construir una casa de ladrillo, además de tener la obligación de presentar un proyecto arquitecto, supone unos costes elevados tanto en materiales como en tiempo de construcción. Una vivienda de este tipo suele costar 750-900 euros por metro cuadrado construido de vivienda como valor orientativo. Valor del solar, impuestos, y proyecto aparte. Siempre hay excepciones, pero como punto de referencia tienes una idea.
Como opción económica puedes construir o montar una casa de madera, abaratando en costes de materiales, proyecto (en algunos casos) e impuestos del valor final de la totalidad, ya que son proporcionales. Sin olvidar que el tiempo de finalización es muchísimo más corto.
Si quieres saber más sobre el uso de la madera en construcción, características, y casos más famosos a nivel mundial, te recomendamos nuestro artículoLa Madera en Arquitectura y Construcción.
¿Ya te has decidido?
Esperamos haber aclarado un poco más las dudas generales.